El siguiente fue el templo Kiyomizu-dera, uno de los templos mas bonitos de Kyoto. Hay casi que escalar para llegar a el por una empinada calle atestada de gente y de puestos de venta de casi todo (incluidos plátanos bañados en chocolate y takoyaki , una especie de bolitas de pulpo). El templo está completamente rodeado de cerezos, y en primavera casi es imposible subir por la cantidad de gente que sube hasta aquí para ver el espectáculo. Desde arriba se ve incluso la torre de Kyoto.
Rancho
Hace 10 años
2 comentarios:
jo, que pasada... me ha encantado leer las entradas sobre japón. mi sueño.
que suerte!!
Suena realmente bien, sobre todo lo de los cerezos, lástima de multitudes.
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